
Horacio Daniel Marín

Horacio Daniel Marín, ingeniero y referente de la industria energética, asumió en 2023 la presidencia y dirección ejecutiva de YPF tras más de tres décadas en Tecpetrol. Su trayectoria se caracteriza por la combinación de rigor técnico y visión estratégica, con proyectos emblemáticos como Fortín de Piedra en Vaca Muerta. Su liderazgo busca transformar a YPF en un actor competitivo global, impulsando exportaciones y promoviendo una cultura meritocrática.
Formación y primeros pasos
Horacio Marín se graduó como ingeniero químico en la Universidad Nacional de La Plata y rápidamente orientó su carrera hacia la industria energética. Posteriormente obtuvo un máster en Ingeniería del Petróleo en la Universidad de Texas, donde adquirió una sólida base técnica y de análisis estratégico. Más adelante amplió su visión empresarial con un programa ejecutivo en Stanford, lo que consolidó un perfil híbrido entre ingeniería y liderazgo.
Carrera en Tecpetrol
Su ingreso al Grupo Techint se dio en 1988 como ingeniero de reservorios en Tecpetrol. A lo largo de más de tres décadas transitó distintos puestos en exploración, producción y estrategia corporativa. Su desarrollo profesional estuvo marcado por la capacidad de adaptarse a contextos cambiantes y por una visión de largo plazo que buscaba vincular la eficiencia operativa con el crecimiento sostenido. Esa combinación le permitió ganar influencia dentro del sector energético.
Proyectos emblemáticos
Uno de sus hitos más reconocidos fue el liderazgo del proyecto Fortín de Piedra en Vaca Muerta, que posicionó a Tecpetrol como protagonista en gas no convencional. También participó en la explotación de El Tordillo en la cuenca del Golfo San Jorge, logrando mejorar técnicas productivas en yacimientos maduros. A esto se sumó la expansión internacional en países como México, Colombia y Perú, consolidando su experiencia en entornos regulatorios diversos y de alta exigencia técnica.
Llegada a YPF
En noviembre de 2023 asumió la presidencia y dirección ejecutiva de YPF, en un contexto de necesidad de transformación. Su designación marcó un retorno a la conducción técnica de la empresa, con foco en eficiencia y alineación a estándares internacionales. Desde su llegada, impulsó la modernización de procesos internos, la reducción de pérdidas y la proyección de exportaciones energéticas. Su estilo de conducción busca fortalecer la competitividad global de la compañía argentina.
Visión estratégica
Marín sostiene que la competitividad de YPF depende de tres ejes: alinear precios relativos con estándares globales, reforzar la producción no convencional y generar una cultura organizacional centrada en la meritocracia. Apuesta a que el país pueda exportar más de 30.000 millones de dólares en petróleo y gas hacia 2031, con metas incluso más ambiciosas hacia 2030. Esta visión convierte a YPF en motor de crecimiento económico con impacto directo en la balanza energética nacional.
Estilo de liderazgo
Su enfoque combina rigor técnico con visión empresarial. Utiliza métricas claras, plazos exigentes y un sistema de seguimiento permanente. Propone que la meritocracia sea el eje del cambio institucional, incentivando talento y responsabilidad. También se distingue por integrar valores personales: en su juventud fue tenista competitivo, experiencia que trasladó al liderazgo al destacar la disciplina, la capacidad de manejar presión y el espíritu de superación como motores de su gestión en YPF.